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KIDNAPED
JIMIN
Es una tarde oscura, la lluvia empaña de silencio las ventanas de mi cuarto, nadie se escuchaba en casa, cuando de momento se oyen pasos acercarse lentamente, abren mi puerta, un chirrido ensordece el silencio.
Me levanto para ver quien era, en ese momento me agarro de mi brazo, jalandome con fuerza hasta fuera de la casa. Sin tan ni siquiera avisarme, mi temor empezó a recorrer todo mi cuerpo pero al ver quien era suspire un poco, -Padre porque me sacas así de mi cuarto y de mi propia casa- lo mire algo sorprendido por su repentina acción, de seguro me extrañaba tanto que decidió sacarme a dar una vuelta, aunque la verdad lo noto extraño pues su corazón está acelerado y sus ojos ya no me miran con el amor de siempre. -Donde vamos- le pregunte, el no me respondió, solo me dio una pequeña risa, y con unas de sus manos, señalándome que me subiera al auto .
Asedie sin decir una palabra, y me introduje, en el, puso en marcha y salimos, pero mediante el camino, no me miraba, solo tenia su mirada en el volante, y sus manos temblaban. -Pa te paso algo,o yo hice algo malo, dime- el silencio de el me calcomia por dentro. Llegamos a un lugar y para el auto.-Donde estamos- mirando hacia los costado,-no conozco este lugar- le dije -Solo baja del auto, ¡¡¡YA!!!- me grito pidiéndome que me bajara del auto, -Pero no se donde estamos, y ademas esta lloviendo-. Salio del auto y se dirijo hacia mi, jalandome a la fuerza de nuevo.
-Hijo lo siento mucho, en verdad no lo quise hacer pero no me quedo de otra- se arrodillo, me miro, sus ojos estaban cristalinos, y unas gotas salían de sus ojos rodeando, poco a poco su cara.
-Porque me pides perdón- intentándolo levantar de la posición que estaba, -si no me hiciste nada malo -Padre-
-No me digas eso, ya que esta persona que esta pidiendo perdón, te vendió, - secándose las lagrimas con una de sus manos
-Pero que estas tratando de decir, no entiendo-Me agache poniendo en la misma posición de el, en cuclillas.
-Mira hijo, tuve un problema con un mafioso, pedí plata para mis vicios, y como no le puede devover, tenia la dos opciones una que me matar y la segunda dar algo a cambio-.Agarrando mi cara con sus dos manos
-¿Q..ue dijiste?-Sin decir ni una palabra, se levanto, caminado hacia el auto, dejándome a mi, así, me levante y corrí hacia el pero era imposible. El ya le había puesto seguro, me miro, mientas yo golpeaba su parabrisas para que me abriera, pero fue inútil, puso en marcha y salio, dejándome en medio de la nada, sin saber a donde ir. o que hacer .
Esta es otra historia, de las tanto que tengo, espero que le guste, ya pongo la segunda parte, de pronto se me dio por gana de escribir, espero que le den mucho amor

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